INTRODUCCIÓN.- Desde mi más tierna infancia, el deporte es la
actividad que más me ha gustado, lo que se ha incrementado con la edad, porque
supone tener como profesión el deporte que más te gusta, lo que es un
privilegio, pues es la mejor forma de ser feliz, (objetivo que todos deseamos);
pero no tuve demasiadas oportunidades para dedicarme a ninguno de ellos, de
forma profesional, lo que pudo ser por alguna de las siguientes causas:
1.- Mi estatura.- En algunos deportes una buena estatura es un
atributo que favorece su práctica, e incluso en alguno de ellos, sin ella no es
posible practicarlo con posibilidades de éxito, como el baloncesto, y como mido 1’64 metros el abanico de
posibilidades de elegir un deporte para transformarlo en mi profesión ha sido
pequeño. Recuerdo como un amigo llamado Manolo, que a los 12 años media 1’70
metros, en las competiciones que realizábamos en el colegio me sacaba un par de
metros, a pesar de mi interés y esfuerzo para superarme.
2.- El lugar de nacimiento.- El hecho de vivir en un pequeño pueblo
de la provincia de Toledo, (Gamonal), hasta los catorce años, no me permitió
practicar nada más que el fútbol, (entre los chicos del colegio y sin
entrenador), y el frontón, (durante solo tres años, porque lo transformaron en
un salón de baile), y al irme a estudiar
Madrid, lo prioritario era dedicarle todo el tiempo disponible a ese
menester, para que el dinero que les costaba a mis padres, pagar los estudios,
diera los resultados esperados.
ASPECTOS POSITIVOS DEL DEPORTE.- Como se puede desprender de lo expuesto
en la introducción, aunque el deporte me ha gustado mucho, no pude practicarlo
con suficiente dedicación, durante los primeros años de mi vida, algo que es
fundamental para conseguir que el deporte se transforme en profesión, por lo
que los deportistas son personas
privilegiadas y, además, suelen estar muy bien pagados; pero a pesar de todo,
siempre he disfrutado plenamente de la practica del deporte, realizando aquellos
que en cada momento se ajustaba más a mi situación particular, como se expone
seguidamente:
1.- En la Escuela de Ingenieros Técnicos
Aeronáuticos.- Durante mi
estancia en la citada escuela, en el programa de actividades, se incluía una
hora diaria para la practica de deportes, principalmente atletismo, (yo
practicaba el lanzamiento de jabalina, lo que se me gustaba mucho y no lo hacia
mal), y futbol, (conseguí el puesto de defensa derecho en el equipo de la
escuela). También hacíamos una tabla de gimnasia con un instructor profesional,
y de todas las actividades que se realizaban en la citada escuela, el deporte y
la gimnasia eran las que más satisfacción me producían, aunque siempre solíamos
decir que lo mejor del deporte era ducharse con agua caliente, después de
haberlo practicado.
2.- En la Escuela de Aprendices de Logroño.- Una vez terminados los estudios de
Ingeniero Técnico Aeronáutico fui destinado a la Escuela de Aprendices de
Logroño, como profesor, en la que fui
instructor de gimnasia de los alumnos de la misma, (chicos de 17 a 20
años). También practique a nivel personal el frontón, (con un sacerdote vasco
que era un auténtico maestro), el tiro a pistola, (participando en diversos
campeonatos de ámbito local y regional), el tenis, (en el club Cantabria,
porque en aquellos momentos Manolo Santana estaba triunfando en las
competiciones internacionales y pretendíamos emularlo). La verdad es que todos
los deportes que practicaba eran una auténtica fuente de felicidad personal,
además de que me permitía mantenerme en perfecto estado físico, mental y
espiritual, además de facilitarme las relaciones con otras personal con las que
coincidía en el citado Club y en la Sociedad Hípica de la ciudad.
3.- De vuelta en Madrid.- Desde los veintisiete años hasta la jubilación
mi vida profesional se desarrolló en Madrid, como funcionario en un par de
Ministerios, en los Cuerpos de Ingenieros Aeronáuticos, (Técnico al principio y
Superior al final), por lo que desde dicha edad hasta los cincuenta años
practiqué el tenis, (en competiciones interministeriales y de diversos clubes),
en las que disfruté muchísimo, no solo a nivel deportivo si no a nivel personal
con los compañeros, pues el deporte nos enseña a relacionarnos con las
personas, a saber ganar, saber perder, trabajar en equipo, saber sufrir sin
desmayar, ser perseverante, tener capacidad de decisión, ser estratega, tener
iniciativa y un largo etc.
Desde los cincuenta años hasta el día de hoy me he dedicado a practicar el
golf, (el más adecuado a mi edad, en estos momentos), con el que disfruto
plenamente, pues es un deporte muy técnico y requiere mucha concentración, en
el que he llegado hasta el hándicat dieciséis, además de que me sirve para
mantenerme en perfecto estado de salud física, mental y espiritual.
Como se puede observar en lo anteriormente expuesto no he conseguido pasar
del nivel de un simple aficionado; pero el deporte me ha proporcionado, además
de un excelente estado de salud físico y mental, muchos momentos de
satisfacción personal, mientras lo practicaba, y siempre he tenido una envidia
sana y una gran admiración por deportistas como Santana, Nadal, Perico Delgado,
Raúl, Diestéfano, Pelé, Casillas, Severiano Ballesteros, Sergio García y un
largo etc; pero como son privilegiados tanto profesionalmente como en lo
relativo a la realización personal, creo que tienen que ser generosos con el
resto de la sociedad, que les aplaudimos y les hacemos ricos, como se expone en
el siguiente apartado.
SI YO FUERA UN /A
DEPORTISTA FAMOSO/ A.- Aunque considero que los deportistas profesionales son personas
privilegiadas, al transformar su afición en su profesión y estar muy bien
remunerados, antes de conseguir sus objetivos corren un gran riesgo, a nivel
escolar, pues si no consiguieran ser excelentes profesionales, (para lo que
tienen que dedicar mucho tiempo), es muy común que no hayan podido dedicar el
tiempo suficiente para superar las pruebas que requiere una carrera, lo que les
obliga a estudiar con edades avanzadas o a
dedicarse a montar negocios que les permitan encauzar su vida, cuando ya
no pueden seguir siendo profesionales de su deporte favorito.
Por todo lo expuesto y por lo que se
percibe en el mundo en que vivimos, los deportistas famosos pueden aportar
grandes beneficios para el país al que pertenecen, por lo que si yo fuera un
deportista famoso trataría de orientar mi vida teniendo en cuenta los
siguientes aspectos:
1.- Planificar la vida al dejar el deporte.- Como la vida profesional del deportista
suele ser más corta que la de la mayoría del resto de mortales, es fundamental
planificar la forma de orientar su vida al dejar la profesión deportiva, ya sea
volviendo a estudiar para formarse y dedicarse a otra profesión, o
transformarse en un emprendedor y/ o en un inversor.
2.- Utilizar la fama y sus conocimientos para algo
positivo.- Los grandes
deportistas suelen tener muchos seguidores, a causa de sus triunfos nacionales
e internacionales, por lo que si yo fuera uno de ellos trataría de utilizarla
en sentido positivo, tomando alguna de las siguientes iniciativas: - Ayudar
a la creación de empleo.- Por ser el problema más acuciante, en estos momentos, si fuera un
deportista famoso, crearía mi propio proyecto o me uniría a algún otro
orientado a la creación de empleo, como el Plan de Acción Solidario,
(consistente en constituir la Fundación Solidaridad Total, para ayudar a
los emprendedores sin recursos), creando empresas solidarias que utilicen
sus beneficios a crear nuevas empresas, lo que daría lugar a una espiral
positiva de creación de puestos de trabajo, ahora que hace tanta falta; lo
que expongo con más detalles en el blog, (www.solidaridadtotal-espartacoxxi).
También sería posible que los deportistas, una vez hayan dejado su profesión
como tales, creen su propia cooperativa para alcanzar el objetivo de crear
tantos puestos de trabajo como sea posible.
- Ayudar
a algunas ONGs.-
Como la fama y el alto poder adquisitivo de los deportistas famosos, es
debido a los ciudadanos que les seguimos, si yo fuera uno de ellos,
devolvería parte de los recurso conseguidos a los citados ciudadanos, a
través de: a) Ayudas a favor de algunas ONGs; b) Crear mi
propia Fundación; c) Participar, aportando recursos, en alguna Fundación
que constituyan otras personas, como es el caso de la Fundación
Solidaridad Total, citada en el apartado anterior. Ver el blog:
www.solidaridadtotal-espartacoxxi.
- Dignificar
la política.- Como
los deportistas famosos suelen ser ejemplares en todas sus manifestaciones,
tiene muchos seguidores, y suelen ser excelentes líderes, si yo fuera un
deportista famoso, otra forma de aprovechar mi tiempo podría ser dedicarme
a la política: a) O constituyendo un partido nuevo con la intención
de establecer una auténtica democracia, en contra de la partitocracia
actual; b) O incorporándome a alguno de los nuevos partidos, como
Ciudadans o algún otro que es seguro surgirán, no tardando mucho, pues en
estos momentos en que vivimos, (junio de 2013), es necesario cambiar el
sistema político, a fin de conseguir una democracia real, (independencia
de los tres poderes), eliminar la corrupción, (se ha extendido demasiado
entre los que detentan el poder), cambiar la ley electoral, (elegir a los
mejores, equidad y representación ciudadana más amplia), optimizar el
Estado de las Autonomías, (que sean viables económicamente y que no se
transformen en reinos de taifas, de nefasto recuerdo), implantar listas
abiertas, (que los ciudadanos podamos eliminar a los corruptos e
incapaces), y un largo etc.
- Potenciar
la marca España.-
Los deportistas españoles de alto nivel, cuando consiguen sus triunfos,
sobre todo si son continuados, supone que muchas personas, de todo el
mundo, conozcan a España en sentido positivo, lo que además de
proporcionar ingresos económicos, por el pago de los impuestos
correspondientes, también ayudan a incrementar el número de turistas
que visitarán su país, (en este caso España).
- Transmitir los valores del deporte.- Como ya se ha indicado anteriormente el deporte nos enseña a relacionarnos con las personas, a saber ganar, saber perder, trabajar en equipo, saber sufrir sin desmayar, ser perseverante, tener capacidad de decisión, ser estratega, tener iniciativa, a aprender a ser un auténtico lider, (como Vicente del Bosque), y un largo etc; por lo que podrían dedicarse a transmitir dichos valores, no solo a los jóvenes si no a todo tipo de personas, principalmente a empresarios y políticos, creando Centros de Estudio de formación humana.
3.- Reorientar la vida profesional.- Como la práctica del deporte proporciona una buena experiencia a nivel
personal en las áreas del liderazgo, el trabajo en equipo, la planificación
estratégica, la táctica, la consecución de objetivos, la disciplina, la
perseverancia, el valor del esfuerzo, la metodología y las relaciones humanas,
al terminar su vida profesional, pueden reorientar su vida en las siguientes
actividades:
- La
formación profesional.- Los deportistas famosos, por sus altos conocimientos conseguidos en
el deporte que han practicado, una actividad propia de su condición sería
la de dedicarse a transmitir sus habilidades a las nuevas generaciones,
creando escuelas de deporte a fin de que el número de deportistas
similares a ellos se multiplique al máximo y España pueda vender los que
le sobren, o los mejores, a otros países, con lo que se conseguiría
incrementar las divisas para el País.
- Ser
referencia para los jóvenes.- Todas las personas necesitamos una referencia de la que copiar,
para profundizar en nuestro desarrollo personal, sobre todo, cuando somos
jóvenes, por lo que los grandes deportistas, pueden hacer mucho bien en
las nuevas generaciones de un país como España, que está sufriendo una
crisis de valores humanos, comportándose de forma ejemplar, como lo están
haciendo Rafael Nadal, Vicente del Bosque, Perico Delgado, Iker Casillas y
un largo etc.
- Ser
emprendedores.- Los
deportistas famosos suelen conseguir grandes recursos económicos durante
su corta vida deportiva, por lo que necesitan tener cuidado en invertir
adecuadamente, dichos recursos, para poder vivir con dignidad, una vez que
las facultades físicas no les permiten mantenerse en la cúspide de su
deporte, por lo que una buena salida profesional podría ser la ser
emprendedor, (crear empresas), formándose en las tecnologías de la gestión
empresarial, (la excelencia y la calidad total), para hacer rentables sus
proyectos empresariales, (preferentemente cooperativas), ya sea en
actividades relacionadas con el deporte practicado o asociándose con otras
personas expertas en otras áreas de actividad; pero teniendo cuidado en
elegir personas honestas, a fin de que los recursos conseguidos con el
deporte puedan ser rentables para ellos y para el país.
Logroño a 14 de junio de 2013
Julio de la Cruz Blázquez
Espartacoxxi
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